
03 Abr Vive Cien Años con Salud
Vive Cien Años con Salud ¿Se Puede Vivir Cien Años con Salud Plena? Muchas personas quieren vivir más tiempo y disfrutar de la vida. Ahora bien, nadie quiere vivir tanto tiempo si no disfruta de un estado de salud que le permita realizar todo aquello que desea.
Vive Cien Años con Salud
Mantener la salud adecuada y llegar a ser centenario es posible si se cuidan el cuerpo y la mente. Aportamos algunos consejos.
Descanso
Descansar adecuadamente durante el día y cuando dormimos es fundamental. Descansar en medio del trabajo o de otra actividad para retomar fuerzas físicas y mentales y continuar con la labor iniciada.
Dormir un número de horas adecuado para tener un sueño que repare y colabore en la renovación del tu cuerpo y la mente, es parte imprescindible del descanso.
El descanso hay que tomárselo en serio y procurar no llevar el cuerpo al límite.
El descanso es un factor fundamental para la salud y bienestar. Cuando descansamos adecuadamente, nuestro organismo se recupera y restaura.
Mientras dormimos los tejidos del cuerpo crecen y se reparan, diversas hormonas son segregadas y la vitalidad se restaura. Además, se regula la presión arterial, la memoria mejora, se fortalece el sistema inmune, la concentración y capacidad mental mejora, y despertarás con más vitalidad y mejor humor.
Actividad física
La práctica de ejercicio diario es fundamental para aumentar nuestra vitalidad y estimular la eliminación de toxinas e impurezas que obstruyen el sistema e impiden un funcionamiento óptimo. Conviene realizar ejercicio regularmente, caminar durante 20-30 minutos diarios (es importante ser constante). El ejercicio moderado mantiene fuertes las articulaciones, los ligamentos, los tendones y los músculos y, además, resulta positivo para el estado de ánimo y para incrementar la seguridad en uno mismo.
Actividad mental
También debemos ser conscientes de lo que pasa por nuestra mente e intentar desarrollar un enfoque positivo, puesto que los pensamientos negativos y las reacciones emocionales pueden afectar al sistema nervioso y provocar diversos trastornos. No cuidar nuestro cuerpo incluye el agotamiento nervioso, el exceso de trabajo, las preocupaciones, la ansiedad, no dormir bien y no relajarse. Lo ideal sería descansar de la rutina del trabajo y encontrar tiempo para relajarse tanto mental como físicamente.
Alimentación
Debe ser equilibrada, es decir, incluir todos los nutrientes naturales en la cantidad adecuada para garantizar el correcto funcionamiento diario del cuerpo. Muy importante, sin agotar ni sobrecargar las reservas de nutrientes del organismo para evitar ciertas enfermedades. Una dieta sana debe incluir macronutrientes, como proteínas, grasas e hidratos de carbono (azúcares y almidón). También algunos minerales (calcio), agua (se recomienda beber al menos seis vasos diarios). Por supuesto, micronutrientes como las vitaminas y oligoelementos. Para ello, debemos consumir pescado (sobre todo azul), aves de corral, fruta, verdura fresca, ensaladas, productos integrales. El consumo excesivo de grasa causa enfermedades cardíacas, hipertensión y diabetes mellitus entre otras.
Los bebés y niños pequeños crecen rápido y necesitan buenas fuentes de proteínas como la carne, los huevos, las legumbres y las hortalizas. La dieta de las mujeres embarazadas debe contener la cantidad adecuada de vitaminas y minerales para aportar los nutrientes necesarios tanto a ella como al feto. En las personas de edad avanzada es muy sano tomar productos lácteos, huevos y hortalizas.
Es importante masticar bien los alimentos para que puedan ser bien digeridos y eliminados. Hay que evitar comer en exceso porque sobrecarga el organismo y dificulta la digestión.
Respiración
Estar tenso inhibe la respiración y el diafragma no se expande ni se contrae correctamente; esto obstaculiza la circulación sanguínea y los tejidos se quedan sin oxígeno vital. Es importante la respiración abdomino-diafragmática para facilitar la relajación y aliviar tensiones profundas. En el momento de inspirar, introducimos el aire por la nariz y expandimos el abdomen, manteniendo inmóvil el tórax. De esta forma, el diafragma desciende y los pulmones se abren para que el aire se introduzca en ellos. Lo expulsamos por la boca y con los labios semicerrados y llevando el abdomen hacia dentro para que el aire salga desde los pulmones.
Higiene
Mantener una buena higiene, tanto personal como del entorno, nos evitará el riesgo de contraer enfermedades infecto-contagiosas. No se debe olvidar el cepillado de los dientes después de cada comida. En la higiene personal, recordemos que somos un todo. Tener precaución en los aseos públicos, evitar andar descalzos por vestuarios, gimnasios, piscinas, etc. que son caldo de cultivo de hongos y bacterias.
Higiene postural
Cada día se aplica con más frecuencia la higiene postural, componente de la ergonomía, en todos los ámbitos. Se debe prestar atención a la postura a diario y además, es muy bueno realizar los ejercicios de sotai 1 y 2 por las mañanas para recuperar la tonicidad adecuada de la musculatura, restablecer la sincronización articular y comenzar el día con plena energía.
Shiatsu
Entre las características que las escuelas, expertos y diccionarios de Japón mencionan en sus textos, encontramos:
“La aplicación periódica de shiatsu contribuye a mejorar la salud”
El Shiatsu puede aplicarse a cualquier edad, desde bebés hasta ancianos. En los bebés prepara su estructura para proporcionarles un crecimiento sano y equilibrado en cuanto a sus sistemas fisiológicos y estable en el terreno emocional. En los jóvenes, ayuda a fortalecer el cuerpo y en las personas adultas, previene e impide las enfermedades y el envejecimiento.
Mantener un equilibrio adecuado
El ser humano puede controlar sus actividades y, por lo tanto, mantener un equilibrio adecuado entre ellas es responsabilidad de cada cual.
Los porcentajes de tiempo, frecuencia e intensidad de realización de las actividades físicas deben ser similares a los de la actividad mental y estas actividades han de estar combinadas con una buena alimentación, una higiene adecuada, una respiración apropiada y un buen descanso. Si, el porcentaje de ejercicio supone un 70% de nuestras actividades cotidianas, el de actividad mental sólo un 10%, la dieta es muy elaborada pero no se mantiene un nivel de higiene aceptable y no prestamos atención a nuestra respiración, el desequilibrio comienza a aparecer y con él la enfermedad.
Podemos Ayudarte con Nuestras Técnicas
Pide Cita
915 705 850
Si quieres aprender con nosotros pincha aquí Shiatsu Curso
o te informamos por mail sy@shiatsuyasuragi.com
Las técnicas naturales que empleamos en la aplicación, enseñanza y difusión en nuestra escuela, centros, revistas, vídeos y artículos No Sustituyen Ni Excluyen la atención o el Tratamiento Médico o Farmacológico Convencional prescrito por profesionales sanitarios.